Al igual que ocurre con los roedores, los insectos también son una fuente de enfermedades, contaminaciones y otras circunstancias que son negativas para trabajadores y clientes, en el caso de un negocio o empresa, y para los habitantes de una vivienda.
Cucarachas, avispas, hormigas… existe un gran número de plagas de insectos que pueden causarnos problemas médicos y en el caso de un establecimiento, causar un grave problema para la imagen del mismo.
DESCOL trabaja para ocuparse de estas plagas basándose en el conocimiento de la biología y ecología de las diferentes especies y antepone siempre la prevención frente a los tratamientos con biocidas.
Todos los productos utilizados, así como las técnicas empleadas, son compatibles con los programas de salud pública e higiene alimentaria.
Antes de iniciar cualquier tratamiento nos encargamos de evaluar el tipo de plaga y sus hábitos, extensión del problema, el tipo de técnica y biocida (insecticida) a utilizar. Además valoramos los posibles riesgos sobre población, animales y medio ambiente para minimizar al máximo los peligros.